Antaño, como todos los años, como siempre, en la misa mayor del Domingo de Ramos, de la Real Parroquia de Santa Maria salía la procesión de las palmas- procesión oficial- que daba la vuelta a la plaza, presidida por el Ayuntamiento, y rezando las preces que para este día señala la liturgia. Pero nada más, ninguna cofradía hacia estación de penitencia, fue en 1961 cuando salió en procesiónh el paso de la Entrada en Jerusalen, y para no coincidir con, los que dijéramos, actos oficiales " La Pollinica" salío por la tarde hasta que en 1963 se fijo su salida a las 12 de la mañana.
Aquel Domingo de Ramos chirrio la pesada puerta del convento ( esta procesión esta concebida para las luces mañaneras). Y como si de pronto las imágenes irrisadas de una antigua vidriera multicolor cobraran vida, el retablo de la Pollinica, apareció por las puertas: policromía de palmas y olivos en manos de los niños. ¡ Hosanna, hosanna, dijo el pueblo de Martos, Dios está entre nosotros. Dios está entre las gentes y entre unos hombres que han venido de fuera, pero que ya sabían las cosas de nuestra tierra y que de nuevo están con nosotros y sus corazones palpitan al unísono con los nuestros, como hace más de dos siglos pervive su huella en el pétreo escudo que corona la puerta del templo de San Francisco, donde dos brazos estigmatizados se unen hacia la eternidad.
Los niños van trazando su itinerario, y la flor, que nació indecisa, echó raíces; la raíz, tronco y el tronco, ramas. Ahora los sembradores se sentirán orgullosos de su obra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario